Mi hija tiene nueve años siempre a dormido con migo por tema de espacio,ahora que tenemos casa más g

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Mi hija tiene nueve años siempre a dormido con migo por tema de espacio,ahora que tenemos casa más grande necesitamos que duerma sola y aunque la cama esta en la misma habitación ella no quiere dormir sola he esperado que se duerma en la cama de ella y después la dejo sola y se pasa en la madrugada con migo, además cuando nos acostamos insiste en dormir del lado donde está mi rostro, si le doy la espalda ella se pasa a frente.
Ya no se que hacer.
Es totalmente posible modificar este comportamiento, aunque puede requerir tiempo y paciencia. Dado que tu hija ha desarrollado un fuerte hábito de dormir contigo, la transición a dormir sola puede sentirse como un gran cambio. Un enfoque gradual suele ser efectivo: puedes comenzar creando una rutina de sueño consistente y reconfortante en su propia cama, acompañándola al principio y retirándote poco a poco. Reforzar su independencia al dormir y elogiar sus logros cada vez que se quede en su cama toda la noche puede motivarla a continuar. Si persisten las dificultades, considerar la asesoría de un psicólogo infantil puede ayudar a diseñar estrategias personalizadas para facilitar esta transición de manera segura y efectiva.

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Hola, que bueno que esté pensando en darle un espacio propio a su hija, ya tiene 9 años y ella comienza su etapa de pubertad, necesita ir generando su intimidad y usted también necesita su propio espacio. Este comportamiento de dormir justo de frente a usted es algo muy particular, pareciera que no quiere que le quite le quite la mirada de encima o que no quiere que vea algo o alguien más, pero finalmente esto son solo posibilidades. Le recomiendo que pueda solicitar una entrevista psicológica. En la terapia psicoanalítica, se busca comprender como se ha gestado la relación entre su hija y usted y la dificultad para poder separarse.
La dinámica entre los padres, y de cada uno de los padres hacia los hijos crea una especie de circulo de protección. Revisar la dinámica de los padres, cómo están manejando situaciones difíciles, qué tan conscientes están de cuando emerge una necesidad, una emoción y cómo logran satisfacerla. Otro aspecto a revisar sería como manejan los límites, a veces aprendemos como padres de ir de un extremo a otro. De ser permisivos a poner castigos, surge la culpa entonces brincamos a ser permisivos nuevamente y así sucesivamente. El último punto a comentar es el manejo de transiciones y cambios, qué tanto ayudan a la preparación cuando van a tener una transición, a veces utilizar cuentos, canciones, historias, explicar y comentar, y luego viene la parte más importante Escuchar! Escuchar sin tratar de convencer, empujar o solucionar, realmente poder estar abiertos a lo que su hija dice, necesita, entendiéndola, acompañándola en lo que expresa; sobre todo, los niños, como los adultos, decimos las cosas con acciones, no con palabras. Para reflexión: si está tratando de decir algo, ¿Qué les está tratando de decir? ¿Cuál es su necesidad?
Buen día, entiendo que esta situación puede ser algo angustiante para ti y leo que haz intentado formas de resolverlo que parece no funcionar.
Pensando en que todos sus años anteriores tu hija ha estado durmiendo contigo es posible que haya desarrollado un apego importante a tu presencia al dormir. Además de que podemos decir que es un habito que se ha establecido a lo largo de los años. Es natural que muestre cierta dificultad o un poco de angustia al cambio de espacio para dormir, ya que de alguna manera eso significa un desprenderse de ti, aunque quizá solo sea al momento de dormir.
Quizá seria recomendable que reserves alguna entrevista con algún profesional en psicología que pueda explorar con tu hija si hay alguna preocupación o temor particular ante esta "separación" y que pueda brindarles una orientación especializada de acuerdo a su situación y posibilidades.
Buenas noches. Entiendo que te resulta un reto este accionar de tu hija, es importante que tengas en cuenta que han generado un hábito. Es común que tarde en habituarse a la nueva casa, así que deberás ser paciente con ella. Te sugeriría hacerlo de manera paulatina, explícale los beneficios de dormir sola y claro, también ponle límites en cuanto al espacio que ahora tienen, proponle días para compartir u días en que deberá dormir sola y poco a poco disminuye los días en que comparten habitación.
¡Hola! Entiendo que este tema te preocupe, pues tanto ella como tú necesitan espacio personal y privacidad, especialmente si ella esta cercana o atravesando la etapa de crecimiento, recomiendo que hables con ella usando la comunicación asertiva, recuérdale los puntos buenos de dormir en su propia cama y déjale claro que siempre estarás cerca de ella para protegerla, es importante que tengas paciencia pues el proceso se puede prolongar un poco. Si lo consideras necesario puedes acudir con un terapeuta para analizar las causas por las que le cuesta tanto dormir separada de ti.
Saludos.
Es normal que tu hija tenga dificultades para dormir sola después de tantos años compartiendo el mismo espacio. A esta edad, los niños buscan la cercanía y seguridad de los padres, y el cambio puede sentirse un poco amenazante para ella. Con paciencia y algunos pasos graduales, puedes ayudarla a adaptarse.
Para empezar, puedes hacer de su cama un espacio especial y acogedor, decorándola con cosas que le gusten, como sábanas, almohadas o peluches favoritos. También puedes establecer una rutina tranquila antes de dormir, donde compartan un tiempo especial, como leer un cuento o conversar un poco, para que se sienta conectada y segura antes de que ambos se acuesten.
Otra estrategia es crear un proceso gradual de transición. Puedes comenzar acompañándola en su cama hasta que se duerma, y poco a poco ir disminuyendo el tiempo que pasas ahí hasta que se sienta más cómoda por su cuenta. Si se despierta en la noche y quiere ir a tu cama, podrías llevarla de vuelta a su cama con calma, repitiéndole que es un espacio seguro y que tú estás cerca. A veces, colocar un objeto tuyo en su cama, como una almohada o prenda que le recuerde a ti, puede darle un sentido de compañía y seguridad.
Recuerda que esta transición lleva tiempo, y es normal que al principio insista en ir a tu cama. Con consistencia y paciencia, poco a poco logrará adaptarse y sentirse cómoda durmiendo sola.
Podrias hacer terapia de cuentos para tu hija, o consultar con un psicólogo que pueda apoyarte con ese tema.

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