Abuso del alcohol - Información, expertos y preguntas frecuentes

En el trastorno por el uso de sustancias específicamente el alcohol, tenemos nuevos medicamentos que apoyan al paciente en una mejoría notable, es una enfermedad crónica, y con tendencia a las recaídas por lo que apoyamos al paciente en educarlo y a sus familiares, el tratamiento es completo basado en los instrumentos de la unidad de conductas adictivas del modelo europeo, con excelentes resultados a largo plazo, generando conciencia de enfermedad y toma de responsabilidad en todo lo que esta enfermedad cerebral lleva al paciente y a los familiares.

Se caracteriza por una dependencia física y psicológica al alcohol. Los siguientes signos pueden llegar a ser indicadores de que se está empezando a tener una dependencia a la bebida: - Sentir una compulsión para beber. - No ser capaz de limitar cuánto se está bebiendo en un momento particular. - Necesidad de beber mayores cantidades de alcohol para sentir el efecto deseado. - Pérdida de interés en actividades, hobbies o relaciones. - Experimentar lagunas (olvidar qué pasó cuando estás ebrio) - Beber solo o esconder su bebida de otros. El alcoholismo es la necesidad que surgen a partir de la falta de nutrición afectiva en la primera etapa de vida del infante.

Desde tiempos inmemoriales el ser humano ha bebido alcohol, y no lo dejará de hacer. Pero, ¿cómo y cuándo se convierte en un problema social, que posteriormente se convierte en un problema de salud pública? No hay una respuesta sencilla para responder. Actualmente se considera una enfermedad, con lo que se le coloca dentro de los problemas de salud, susceptible de estudio desde los ángulos que son característicamente médicos: a) Etiología.- (causas). b) Sintomatología. c) Diagnóstico. d) Rehabilitación. e) Tratamiento. f) Prevención. ¿El tratamiento del alcoholismo es posible? Sí, es necesario que el terapeuta sea especialista en ADICCIONES.

La ingestión de alcohol y otras substancias que alteran el sistema nervioso central, como son las drogas, tranquilizantes, estimulantes, relajantes, medicamentos para dormir, tabaco, etc. no siempre se relacionan con abuso pero si con el uso cotidiano aun en pequeñas cantidades. En corto tiempo provoca dependencia física y psicológica y da como resultado la disminución de reflejos, la alteración del temperamento y reacciones desordenadas que causan problemas familiares, sociales y laborales. Para resolverlo utilizamos técnicas variadas, efectivas y no traumáticas, (hipnosis, reprogramación, terapia racional emotiva, etc.) que llevan a dejar cualquier dependencia en el menor tiempo posible.

El alcoholismo es un padecimiento que genera una fuerte necesidad y ansiedad de ingerir alcohol, de forma que existe una dependencia física del mismo, manifestándose a través de varios síntomas de abstinencia cuando no es posible su ingesta. El alcoholismo, causas, consecuencias y tratamiento. Es una enfermedad crónica que daña el organismo, el funcionamiento familiar y social y puede ser causa de violencia, conductas antisociales, desavenencias familiares, accidentes e incluso de homicidios.

El alcohol es una sustancia legal en México, pero un potente depresor del Sistema Nervioso Central, actualmente los jóvenes ingieren grandes cantidades los fines de semana combinando con bebidas energéticas y esto provoca que tengamos jóvenes borrachos pero despiertos, alterando aún más otro neurotransmisor llamado Serotonina afectando el ciclo del sueño- vigilia. Se considera que esta sustancia es una droga de ventana o apertura para todas las drogas ilegales como la cocaína, cannabis, anfetaminas, metanfetaminas, etc.

Cada año se producen 3,3 millones de muertes en el mundo debido al consumo nocivo de alcohol2, lo que representa un 5,9% de todas las defunciones. El uso nocivo de alcohol es un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos. En general, el 5,1% de la carga mundial de morbilidad y lesiones es atribuible al consumo de alcohol, calculado en términos de la esperanza de vida ajustada en función de la discapacidad (EVAD). El consumo de alcohol provoca defunción y discapacidad a una edad relativamente temprana. En el grupo etario de 20 a 39 años, un 25% de las defunciones son atribuibles al consumo de alcohol.

No existe una sola causa, sino una interacción de factores fisiológicos, psicológicos y sociales y que originan esta farmacodependencia. Los individuos más propensos son: Individuos a los que les hace sentir más relajación y alivio; a los que poseen ciertas características de la personalidad que les impide enfrentar con éxito los estados depresivos, la ansiedad y la depresión en sí misma, a los que pertenecen a culturas en las que se provoca culpabilidad y confusión en torno a la conducta del bebedor.