Equipo Doctoralia
Gracias a la tomografía de cabeza, podemos “mirar” por debajo del cráneo. Esto sería imposible con un ultrasonido, mientras que una resonancia magnética es muy cara. Continúa leyendo si quieres conocer qué es una tomografía craneal y para qué sirve.
La tomografía axial computarizada (TAC) es la técnica más utilizada para visualizar el cerebro. Esto se logra al combinar una serie de radiografías de muy alta calidad. Gracias a la tomografía de cabeza, los especialistas pueden diagnosticar diversas enfermedades. Sin embargo, esta prueba no se puede realizar con demasiada frecuencia. Además, se requiere de una preparación especial en algunos casos.
¿Qué más vale la pena saber sobre este estudio? Hemos recopilado la información más relevante al respecto. De este artículo, aprenderás:
La TAC de cabeza (también conocida como TAC de cráneo) es una prueba de diagnóstico por imágenes. Consiste en tomar una serie de radiografías (rayos x) desde diferentes ángulos. Estas imágenes se superponen entre sí mediante un software especializado. Con ello, se crean modelos en dos y tres dimensiones sobre las estructuras internas de la cabeza.
A diferencia de otras pruebas de imagenología, la tomografía computarizada muestra tanto huesos como tejidos blandos. Por ello, su valor diagnóstico es mucho más elevado. También se le conoce como “tomografía de cerebro”.
Para conocer más, ver también Tomografía axial computarizada: ¿Qué es?
El costo de una tomografía computarizada de la cabeza varía dependiendo del centro diagnóstico y de si es simple o contrastada. Sin embargo, en México la puedes encontrar entre los $1,500 y $3,500 aproximadamente. Para conocer más, ingresa a Tomografía Cráneo. En este sitio web, también podrás agendar tu cita en cualquier ubicación que te acomode.
A diferencia de un ultrasonido (ecografía) o de una resonancia magnética, la tomografía cerebral implica un ligero riesgo. Esto se debe a que utiliza radiación ionizante que, a la larga, puede dañar el ADN de las células. Sin embargo, esto sólo sucede cuando una persona está constantemente expuesta a rayos x. Por ello, la TAC craneal no se realiza con demasiada frecuencia. Para mayor información, te recomendamos consultar con un médico especialista.
Esta prueba se utiliza principalmente en neurología. Se realiza ante padecimientos como:
También se realiza una TAC de cerebro ante síntomas como tensión muscular aumentada o debilitada, alteraciones recurrentes de la conciencia, desmayos, fuertes dolores de cabeza, trastornos del movimiento, paresia o parálisis.
La tomografía computarizada de la cabeza permite hacer un diagnóstico preciso. Esto es indispensable para iniciar un tratamiento adecuado. Sin embargo, también se realiza ante emergencias como:
La TC de cabeza también muestra:
Adicionalmente, la TC de cabeza se realiza en caso de toxoplasmosis, cisticercosis, demencia, malformaciones vasculares, control postoperatorio o sospecha de enfermedades hipofisarias.
*Para estos casos se realiza una tomografía de cabeza y cuello
La radiación puede provocar malformaciones en el feto. Por ello, la principal contraindicación es el embarazo. Como medida de precaución, se recomienda realizar la prueba en la primera parte del ciclo menstrual. De esta manera, se excluye la posibilidad de un embarazo.
Por otra parte, la claustrofobia, miedo a espacios cerrados, puede ser una contraindicación relativa. Sin embargo, el tomógrafo es un dispositivo abierto y ventilado. Se suele utilizar sedante cuando una persona no puede permanecer quieta durante mucho tiempo.
A veces se utiliza un medio de contraste para una tomografía computarizada cerebral. Es decir, una sustancia que mejora la visibilidad de las estructuras anatómicas. Se utiliza ante inflamación, malformaciones vasculares, cambios neoplásicos y metástasis. Generalmente no se necesita contrastar en caso de lesiones y cambios superficiales en el cerebro, cráneo o cara.
Aún así, el médico especialista puede solicitar una tomografía contrastada si los resultados no son claros. Las principales contraindicaciones son:
Tras la administración del contraste, quizá tengas una sensación de calor y un sabor metálico en la boca. Esto es normal. Sin embargo, en casos muy raros, se pueden presentar reacciones alérgicas. Cuando es leve, el principal síntoma es la aparición de urticaria. Pero en casos más graves, se puede presentar insuficiencia hepática, cardiovascular o respiratoria. Cabe mencionar que estos casos son extremadamente raros y el personal médico está preparado para atenderlos.
No se necesita preparación para una TAC simple. Sin embargo, el radiólogo puede optar por realizar una tomografía de la cabeza contrastada en el último minuto. Por ello, recomendamos realizar las siguientes preparaciones:
Antes de administrar el contraste, se debe evaluar el funcionamiento de los riñones. Por esta razón se solicita el análisis clínico de creatinina en sangre. Para conocer más, ver también Medio de contraste: ¿Qué pruebas de laboratorio se necesitan?
Para una TAC de cráneo simple y contrastada debes llevar los siguientes documentos:
Adicionalmente, debes informar al personal de salud acerca de enfermedades crónicas, alergias y medicamentos prescritos.
Te recomendamos llegar al centro de radiología con anticipación. Allí deberás responder un cuestionario de salud. Después, deberás retirar elementos metálicos, ya que pueden alterar las imágenes. En algunos lugares, te darán una bata protectora antes de iniciar el procedimiento. Con ella, se protegen los órganos reproductivos de la radiación. Por último, te inyectarán el contraste en caso de ser una tomografía contrastada de cráneo.
Posteriormente, te llevarán a una sala en la que se encuentra el tomógrafo. Esta máquina es la que emite rayos x desde un plano axial para tomar las imágenes. Se compone de un aro gigante y una camilla. El personal de salud te ayudará a recostarte para iniciar el estudio. **El procedimiento es indoloro y puede durar entre 15 y 45 minutos.**Durante este tiempo, deberás permanecer inmóvil y contener la respiración cuando se te indique. El radiólogo se encontrará en una habitación separada, pero siempre estará en contacto contigo. De esta manera, debes informar al personal de inmediato en caso de presentar alguna molestia.
Las imágenes de la tomografía de cabeza suelen entregarse después de unos días. Sin embargo, esto depende de cada centro de diagnóstico. Generalmente te entregarán también una interpretación especializada.
Después de una tomografía de cabeza simple, podrás volver a tus actividades cotidianas. No obstante, tras un estudio contrastado, deberás permanecer al menos 30 minutos en la instalación. Esto permite al personal reaccionar en caso de presentarse una reacción alérgica.
Para eliminar el contraste, debes beber mucha agua durante los días posteriores. Además, las madres lactantes no podrán amamantar a su bebé y deberán tirar la leche producida en esos días.
Lea también: Tomografía computarizada de laringe
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