Ultrasonido doppler obstétrico

Se recomienda a partir del segundo trimestre del embarazo, alrededor de las 20 semanas, aunque puede realizarse en cualquier momento si el médico lo considera necesario. Este estudio es particularmente útil para evaluar el flujo sanguíneo en el cordón umbilical, la placenta y las arterias uterinas, lo que ayuda a detectar posibles complicaciones como la restricción del crecimiento intrauterino o la preeclampsia. La decisión sobre el momento adecuado para realizarlo dependerá de la condición específica de cada embarazo y de las indicaciones del profesional de salud.

La cantidad de veces dependerá de las recomendaciones del médico y de las necesidades específicas de cada paciente. Generalmente, se utiliza en situaciones donde se requiere monitorear el flujo sanguíneo del feto y la placenta, especialmente en embarazos de alto riesgo. No existe un límite estricto en cuanto a la frecuencia, pero se procura realizarlo solo cuando es médicamente necesario para asegurar la salud tanto de la madre como del bebé.

El ultrasonido obstétrico convencional se utiliza principalmente para visualizar la anatomía del feto, medir su crecimiento y evaluar la cantidad de líquido amniótico. En cambio, el ultrasonido Doppler obstétrico permite evaluar el flujo sanguíneo en el cordón umbilical, la placenta y las arterias del feto. Esta técnica proporciona información crucial sobre la circulación sanguínea y puede detectar problemas como la restricción del crecimiento intrauterino o la insuficiencia placentaria. Por lo tanto, mientras que el ultrasonido convencional se enfoca en la estructura, el Doppler se centra en la función y el flujo sanguíneo.

No siempre es necesario contar con una orden médica para realizarse este estudio, aunque se recomienda. En muchos casos, los médicos solicitan este tipo de ultrasonido para evaluar el flujo sanguíneo en el embarazo y detectar posibles complicaciones. Sin embargo, algunas clínicas pueden ofrecer el servicio sin necesidad de una referencia médica previa. Es importante consultar con la clínica o el centro de salud para conocer sus requisitos específicos y asegurarse de que el estudio se realice de manera adecuada y segura.