Dra. Sandra E. Pérez Monter

Menopausia

La especialidad en Menopausia es fundamental para un apropiado tratamiento de las pacientes en esta etapa. Es preciso el conocimiento de aspectos no ginecológicos para ser un profesional de la menopausia, y un entrenamiento para la prescripción de fármacos hormonales y no hormonales, que se utilizan en esta etapa. Ser experta en Menopausia, además de ser un orgullo para mí, es la parte de la medicina que me hace más feliz. Y es por eso que constantemente busco lo mejor y más nuevo en la actualización médica, para poder ofrecer las mejores opciones en Terapia Integral de la Paciente en el Climaterio.

Terapia de Reemplazo Hormonal (TRH)

Especialista en prescripción de Terapia Hormonal en Perimenopausia La Terapia Hormonal está indicada en pacientes que se encuentran en el período de la perimenopausia o postmenopausia, para tratar los principales síntomas como los bochornos, ansiedad, depresión, disminución de la libido, y para prevenir la osteoporosis. Las hormonas deben ser prescritas por un profesional de la menopausia, ya que no todas las pacientes son candidatas a utilizarlas. Y las que pueden usarlas, deben llevar una apropiado monitoreo periódico para vigilar que los resultados son óptimos e inocuos.

Parto humanizado

El parto y cesárea humanizados, son aquellos en los que se respeta el momento del nacimiento de un bebé, tomando en cuenta los factores emocionales de los padres, manteniéndolos con una información apropiada de los procedimientos, así como de su consentimiento, favoreciendo el vínculo padres-hijo, así como evitar procedimientos innecesarios. De igual manera, una cesárea indicada, deberá realizarse en un ambiente confortable para la madre y favorecer el vínculo con el recién nacido. La decisión de la madre acerca de la vía de nacimiento es respetada, siempre y cuando la integridad y salud de madre o hijo, no se vean comprometidas.

Embarazo de alto riesgo

Llevar el control del embarazo de alto riesgo es algo sumamente complicado. Habitualmente se trata de embarazos complicados con alguna enfermedad como la hipertensión, la diabetes, enfermedades renales, o enfermedades autoinmunes; o bien, son embarazos complicados con enfermedades propias del embarazo, como la placenta previa o la preeclampsia. Es imperativo llevar un control multidisciplinario y estricto en algunos casos, para poder llevar a término y en buenas condiciones al binomio madre-hijo.