Dr. Raúl Miranda Arce

Entiendo tu preocupación sobre el riesgo de dependencia con el uso de Victan. Es importante tener en cuenta varios aspectos:
1. Riesgo de dependencia: Las benzodiacepinas, como el Victan, pueden causar dependencia si se usan a largo plazo o en dosis altas. Aunque no experimentaste síndrome de abstinencia anteriormente, el riesgo puede aumentar con una dosis más alta y un uso prolongado3.
2. Experiencia previa: Tu experiencia previa de no tener problemas al dejar el medicamento es positiva, pero cada situación es diferente. La dosis más alta puede tener un impacto distinto en tu cuerpo.
3. Duración del tratamiento: Es crucial seguir las indicaciones de tu médico y no prolongar el tratamiento más allá del tiempo recomendado. Generalmente, se sugiere no usar benzodiacepinas por más de 12 semanas para minimizar el riesgo de dependencia.
4. Monitoreo y ajuste: Mantén una comunicación abierta con tu médico sobre tus preocupaciones. El puede ajustar la dosis o la frecuencia del medicamento según sea necesario y monitorear cualquier signo de dependencia o efectos secundarios.
5. Alternativas y complementos: Considera complementar tu tratamiento con terapias no farmacológicas, como la psicoterapia, técnicas de relajación, que pueden ser efectivas para manejar la ansiedad y el insomnio sin el riesgo de dependencia.
Es normal sentirse confundida cuando recibes información contradictoria. Lo más importante es trabajar en estrecha colaboración con tu médico para encontrar el equilibrio adecuado en tu tratamiento.

Entiendo que esta situación te cause mucha ansiedad y desesperación. La pandemia ha dejado una huella significativa en muchas personas, y es común que ciertos hábitos adquiridos durante ese tiempo persistan y generen ansiedad. Algunas ocasiones estas circunstancias son detonantes de conflictos psicológicos no resueltos que anteriormente aunque presentes no estaban tan manifiestos o estaban compensados
Aquí hay algunas consideraciones y recomendaciones que podrían ayudarte:
1. Reconocimiento del problema: Es un buen primer paso que reconozcas que esta conducta te genera ansiedad. La conciencia de enfermedad es fundamental para poder trabajar en ello.
2. La psicoterapia es muy efectiva para tratar trastornos de ansiedad y fobias. Un terapeuta puede ayudarte a identificar y cambiar los pensamientos y procesos afectivos que están contribuyendo a tu ansiedad.
3. Gradualidad en el cambio: Intenta hacer cambios graduales. Por ejemplo, podrías empezar por reducir la frecuencia de los baños al llegar a casa. En lugar de bañarte cada vez que entras, podrías intentar hacerlo cada dos veces y luego ir aumentando el intervalo.
4. Técnicas de relajación: Practicar técnicas de relajación como la respiración profunda o la meditación puede ayudarte a manejar la ansiedad cuando sientas la necesidad de bañarte inmediatamente al llegar a casa.
5. Exposición gradual: La exposición gradual a la situación que te causa ansiedad, en este caso, no bañarte inmediatamente al llegar a casa, puede ayudarte a desensibilizarte. Esto se hace con el apoyo de un terapeuta.
6. Apoyo de tu pareja: Habla con tu esposo sobre tus sentimientos y pídele su apoyo mientras trabajas en este proceso. Su comprensión y apoyo pueden ser muy valiosos.
7. Consulta profesional: Si sientes que la ansiedad es abrumadora y difícil de manejar por ti misma, considera buscar la ayuda de un psiquiatra. Ellos pueden ofrecerte apoyo farmacológico y estrategias personalizadas.
Recuerda que es un proceso y que está bien tomarse el tiempo necesario para adaptarse a los cambios. No estás sola en esto, y hay recursos y personas que pueden ayudarte a superar esta ansiedad. Incluso hay quienes pueden hacer una evaluación inicial por videoconferencia