Una TAC simple de abdomen y pelvis nos proporcionaria información sobre el tamaño de los ganglios del

Difícilmente... si el estudio fue simple y el paciente es de constitución delgada. El medio de contraste venoso y oral es necesario y la grasa intraabdominal también ayuda a diferenciar estructuras que de otra manera pueden confundirse.

Buenos días, el tipo de tomografía que se realizó debe de ser simple y con contraste oral, y lo ideal con contraste endovenoso.
Si nos da información sobre el tamaño de los ganglios, pero normalmente en el reporte radiológico no se anota si estos no tienen alteración en cuanto a su tamaño, morfología, relación corteza médula, etc. Lo más idóneo es que el médico solicitante le refiera al médico radiólogo que interpretó su estudio que le indique las características de estos ganglios de una forma intencionada.
Saludos

Buenas tardes! Lo ideal es que se complemente el estudio en una fase contrastada por via intravenosa y previa toma de contraste via oral, ya que se pueden llegar a confundir las estructuras y es muy importante valorar el tipo de reforzamiento. Saludos!!

Una tomografía axial computarizada (TAC) simple de abdomen y pelvis es una herramienta útil para evaluar diversas estructuras anatómicas, incluyendo los ganglios linfáticos del área del tubo celíaco. En condiciones normales, estos ganglios pueden no ser visibles o aparecer dentro de rangos de tamaño que no sugieren patología. Sin embargo, cuando hay un aumento significativo en su tamaño, usualmente esto se reporta en la interpretación radiológica, ya que puede ser indicativo de inflamación, infección o procesos neoplásicos.

Si en el reporte final de la TAC no se menciona específicamente el tamaño de los ganglios linfáticos del tubo celíaco, es probable que el radiólogo no haya encontrado hallazgos significativos o anormales en esa región. No obstante, si existe preocupación específica sobre esta área o una indicación clínica particular, sería conveniente discutirlo directamente con el médico que solicitó el estudio. Este profesional puede solicitar una revisión del estudio o, si se considera necesario, estudios adicionales como una TAC contrastada o incluso una resonancia magnética (RM) para obtener mayor detalle.

Es importante mantener una comunicación abierta con su médico tratante para aclarar cualquier duda y asegurar que los estudios realizados sean los adecuados para su diagnóstico y tratamiento.