Tengo probemas con la procratinacion, yo planifico lo que voy hacer durante la semana, pero siempre
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Tengo probemas con la procratinacion, yo planifico lo que voy hacer durante la semana, pero siempre termino dejando todo al tercer dia y empiezo a perder el tiempo, intento con varios metodos de organizar mi tiempo y hacer las cosas mas sencillas de completar, pero termino procrastinando al tercer dia SIEMPRE, no importa lo que haga, ni con cuanta emocion o entusiasmo empiece las cosas, la verdad no se si es falta de disciplina, resiliencia, control sobre mis emociones, no tengo la menor idea de que hacer,me cuesta salir de mi zona de confort y empezar cosas nuevas, en mi mente solo esta la palabra "¿Para que? hazlo otro dia" y termino cayendo en el mismo bucle de siempre, es como si tuviera miedo pero no se de que
Te invito a revisar y a pensar cuáles han sido todos tus intentos fallidos de solución, ¿y por qué sigues intentando hacer lo mismo si ya viste que no ha funcionado? Por lo que leo el problema no es la organización, es algo más.
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El porque no somos constantes tiene que ver con dos factores, uno organizacional que es el que ya has abordado y el otro emocional. Este último suele ser el mayor obstáculo en el porque no lo logramos con nuestros propósitos.
La procrastinación se debe a como me hace sentir la situación. En general tendemos a evitar aquello que nos genera alguna emoción desagradable. Ej: Te invitan a una fiesta donde va pura gente que te cae mal. Empieza la procrastinación "Es que ando con mucho trabajo, no quiero gastar en Uber, ando muy cansado, etc." Así evito algo que me va a causar un malestar emocional (fastidio de estar con gente que no me cae bien).
Esto que tu intentas habría que ver que te genera emocionalmente para poder darle la vuelta a esas emociones y entonces si cumplir cualquiera que sea tu objetivo. No dudes en acudir con tu psicólogo de confianza.
La procrastinación se debe a como me hace sentir la situación. En general tendemos a evitar aquello que nos genera alguna emoción desagradable. Ej: Te invitan a una fiesta donde va pura gente que te cae mal. Empieza la procrastinación "Es que ando con mucho trabajo, no quiero gastar en Uber, ando muy cansado, etc." Así evito algo que me va a causar un malestar emocional (fastidio de estar con gente que no me cae bien).
Esto que tu intentas habría que ver que te genera emocionalmente para poder darle la vuelta a esas emociones y entonces si cumplir cualquiera que sea tu objetivo. No dudes en acudir con tu psicólogo de confianza.
Vale la pena tanto explorar aquellos aspectos que te inquietan de la tarea como desarrollar estrategias que se ajusten a tu ritmo, existe ya un patrón que señalas, los primero días todo avanza bien y posteriormente decae tu meta, reconoce los logros que vas teniendo a la par que ajustas gradualmente tus expectativas hasta llegar a tus metas. Cuando nos enfrentamos a tareas de raciocinio nuestro cerebro automáticamente siente fatiga debido a la energía que se requiere para cubrir las actividades, lograr desarrollar estrategias como la auto instrucción y plantear objetivos y pautas realistas puede ayudarnos en este sentido.
La voluntad es una función mental que se ve influida por las emociones. Entonces sería necesario trabajar en ellas para poder modificar lo que describes. A su vez, éste tipo de situaciones puede darse de dos formas: bradibulia ejecutiva (voluntad lenta) o abulia ejecutiva (querer hacer algo pero no poder). Cabría discernir cuál te aplica.
Leo que te preguntas "¿Para qué?", es una buena inquitud. Si no sabes para que haces las cosas es inevitable que dudes en cumplir tus objetivos.
Hay que explorar para conocer la respuesta.
Hay que explorar para conocer la respuesta.
Hola buenas noches comprendo tu situación, para poder determinar que es lo que esta presenciado la procrastinación en tu vida es necesario indagar aspectos emocionales, sociales y ambientales que puedan esta involucrados e investigar por que se presenta ese miedo. Este proceso se logra mediante un tratamiento psicológico, el cual mediante el progreso podrás ir realizando tus actividades y disfrutar de ellas. Es recomendable la terapia con enfoque cognitivo conductual a que su objetivo es identificar y cambiar patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales que afectan el bienestar del paciente. Saludos
Es completamente comprensible que te sientas frustrado/a con la procrastinación, especialmente cuando intentas organizarte y siempre terminas cayendo en el mismo patrón. Lo que describes no es solo falta de disciplina, sino un proceso más profundo que puede estar relacionado con el miedo, la autoexigencia y la evitación emocional.
¿Por qué siempre procrastinas al tercer día?
1. Fatiga de la motivación inicial
Al comenzar, hay una sensación de entusiasmo y energía, pero al tercer día, la novedad se desvanece y aparece la resistencia mental.
2. El cerebro prefiere el placer inmediato
La procrastinación ocurre cuando el cerebro elige una recompensa inmediata (descansar, ver redes, evitar estrés) en lugar de un beneficio a largo plazo.
3. Miedo al fracaso o a la incomodidad
Si tu mente repite "¿Para qué? Hazlo otro día", puede ser un mecanismo de defensa para evitar sentir presión, frustración o la posibilidad de no hacerlo perfecto.
4. Falta de un propósito emocional en la tarea
Cuando la mente no encuentra una razón poderosa para hacer algo, lo pospone porque no lo percibe como urgente o gratificante.
5. Ciclo de autoexigencia y culpa
Cada vez que procrastinas, te sientes mal, lo intentas de nuevo con más presión y vuelves a caer en el mismo bucle.
¿Cómo romper el ciclo de la procrastinación?
1⃣ Cambia la pregunta de "¿Para qué?" por "¿Qué pequeño paso puedo dar ahora?"
En lugar de enfocarte en todo lo que hay que hacer, concéntrate en una acción mínima que puedas completar en 5 minutos.
2⃣ Usa la "regla de los tres días" a tu favor
Como el tercer día es crítico para ti, haz que ese día sea de adaptación, no de esfuerzo máximo.
Ejemplo: Si estás escribiendo un proyecto, los dos primeros días avanza con intensidad, y el tercero solo revisa sin exigirte demasiado.
3⃣ Elimina la necesidad de "sentirte motivado/a"
No esperes a sentir ganas para actuar. Piensa en la acción como cepillarte los dientes: lo haces sin discutir contigo mismo.
4⃣ Usa la técnica de los "5 minutos"
Dite a ti mismo/a: "Solo lo haré 5 minutos." Una vez que empieces, es más fácil continuar.
5⃣ Cambia tu enfoque: trabaja con tu mente, no contra ella
Si la rutina estructurada no te funciona, prueba métodos más flexibles, como trabajar en intervalos pequeños o enfocarte en metas semanales en lugar de diarias.
6⃣ Identifica el miedo detrás de la procrastinación
Pregúntate: "¿Qué me genera ansiedad sobre esta tarea?" A veces, procrastinar no es por flojera, sino por miedo a equivocarse, a no estar listo/a o a no ser suficiente.
7⃣ Si el problema persiste, evalúa si hay un factor de ansiedad o déficit de atención
Si procrastinas constantemente y te cuesta concentrarte, podría haber un factor de ansiedad o TDAH (Trastorno por Déficit de Atención en adultos). Un especialista puede ayudarte a identificarlo.
Mensaje clave:
No se trata solo de organización o disciplina, sino de entender cómo funciona tu mente y encontrar estrategias que realmente se adapten a ti. La clave es reducir la presión, empezar con pasos pequeños y trabajar con tu mente, en lugar de luchar contra ella.
Si necesitas más orientación sobre este tema, o generar una cita en línea estaré encantado de ayudarte.
Atentamente,
Psic. Pedro Linares Manuel
¿Por qué siempre procrastinas al tercer día?
1. Fatiga de la motivación inicial
Al comenzar, hay una sensación de entusiasmo y energía, pero al tercer día, la novedad se desvanece y aparece la resistencia mental.
2. El cerebro prefiere el placer inmediato
La procrastinación ocurre cuando el cerebro elige una recompensa inmediata (descansar, ver redes, evitar estrés) en lugar de un beneficio a largo plazo.
3. Miedo al fracaso o a la incomodidad
Si tu mente repite "¿Para qué? Hazlo otro día", puede ser un mecanismo de defensa para evitar sentir presión, frustración o la posibilidad de no hacerlo perfecto.
4. Falta de un propósito emocional en la tarea
Cuando la mente no encuentra una razón poderosa para hacer algo, lo pospone porque no lo percibe como urgente o gratificante.
5. Ciclo de autoexigencia y culpa
Cada vez que procrastinas, te sientes mal, lo intentas de nuevo con más presión y vuelves a caer en el mismo bucle.
¿Cómo romper el ciclo de la procrastinación?
1⃣ Cambia la pregunta de "¿Para qué?" por "¿Qué pequeño paso puedo dar ahora?"
En lugar de enfocarte en todo lo que hay que hacer, concéntrate en una acción mínima que puedas completar en 5 minutos.
2⃣ Usa la "regla de los tres días" a tu favor
Como el tercer día es crítico para ti, haz que ese día sea de adaptación, no de esfuerzo máximo.
Ejemplo: Si estás escribiendo un proyecto, los dos primeros días avanza con intensidad, y el tercero solo revisa sin exigirte demasiado.
3⃣ Elimina la necesidad de "sentirte motivado/a"
No esperes a sentir ganas para actuar. Piensa en la acción como cepillarte los dientes: lo haces sin discutir contigo mismo.
4⃣ Usa la técnica de los "5 minutos"
Dite a ti mismo/a: "Solo lo haré 5 minutos." Una vez que empieces, es más fácil continuar.
5⃣ Cambia tu enfoque: trabaja con tu mente, no contra ella
Si la rutina estructurada no te funciona, prueba métodos más flexibles, como trabajar en intervalos pequeños o enfocarte en metas semanales en lugar de diarias.
6⃣ Identifica el miedo detrás de la procrastinación
Pregúntate: "¿Qué me genera ansiedad sobre esta tarea?" A veces, procrastinar no es por flojera, sino por miedo a equivocarse, a no estar listo/a o a no ser suficiente.
7⃣ Si el problema persiste, evalúa si hay un factor de ansiedad o déficit de atención
Si procrastinas constantemente y te cuesta concentrarte, podría haber un factor de ansiedad o TDAH (Trastorno por Déficit de Atención en adultos). Un especialista puede ayudarte a identificarlo.
Mensaje clave:
No se trata solo de organización o disciplina, sino de entender cómo funciona tu mente y encontrar estrategias que realmente se adapten a ti. La clave es reducir la presión, empezar con pasos pequeños y trabajar con tu mente, en lugar de luchar contra ella.
Si necesitas más orientación sobre este tema, o generar una cita en línea estaré encantado de ayudarte.
Atentamente,
Psic. Pedro Linares Manuel
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