Se puede descartar la cirrosis biliar primaria con una ecografia abdominal?

Buen Día. El ultrasonido convencional, nos puede proporcionar datos para sospechar, de forma general, de la causa de cirrosis biliar primaria. Para complementar diagnóstico debemos contar con estudios de laboratorio dirigidos ha este diagnóstico, de forma definitiva, el diagnóstico de cirrosis debe ser mediante biopsia y estudio histopatologico. Actualmente el fibroscan puede ayudarnos al diagnóstico, sin la necesidad de una biopsia, con buenos resultados, pero es una técnica diferente de ultrasonido.

Buenas tardes!!! La ecografia o ultrasonido abdominal es un estudio que nos ayuda a determinar la forma y tamaño del hígado, no para diagnosticar cirrosis biliar primaria, para ello se deben tomar en cuentan estudios de laboratorio como son los anticuerpos antimitocondriales y pruebas de función del hígado, nos puede ayudar otros estudios para determinar el grado de afección de la enfermedad.

El ultrasonido nos puede orientar a pensar en datos de daño hepatocelular como es el caso de la cirrosis así como otros componentes como hipertensión portal, sin embargo la comprobación es mediante estudio histopatológico, saludos.

La cirrosis biliar primaria es una enfermedad crónica que ocasiona la inflamación y destrucción progresiva de los pequeños conductos biliares llamados canalículos. La destrucción de estas estructuras ocasiona colestasis, es decir, acumulación de bilis en el hígado que genera ictericia. Existen muchas otras causas de colestasis, a grandes rasgos las podemos agrupar en las de etiología intrínseca del hígado o bien, por una obstrucción de la vía biliar. El ultrasonido es el estudio mas confiable para valorar el hígado y la vía biliar, sin embargo para el diagnóstico de cirrosis biliar primaria se requieren muchos más estudios para tener un diagnóstico de certeza tales como, biopsia, anticuerpos, etc. Consulte con un experto en hígado para que lo valore de forma completa y puedan concluir la etiología de su padecimiento y así poder ofrecerle un tratamiento.

La ecografia o ultrasonido puede orientar para ver si hay cirrosis hepática junto a un cuadro clínico.
Otros estudios como la tomografia o el Fibroscan son de mayor utilidad