Buenas tardes. ¿Quisiera saber como intervienen las dos líneas de la psicología, clínica y educati

La drogadicción impacta áreas del cerebro que tienen que ver directamente con el aprendizaje por un lado y con la motivación por el otro . Ambos intervienen en la educación , por ello es tan común que las personas con Adicciones no concluyan sus estudios o bien su rendimiento sea muy pobre.

Podemos reconocer que una persona es adicta, cuando la droga le genera dificultades en diferentes áreas de su vida y un desinterés por el auto cuidado y la responsabilidad en las mismas. Siempre, la drogadicción va acompañada de un trastorno depresivo o de ansiedad, por lo que se vuelve muy difícil que la persona se desenvuelva óptimamente para generar su calidad de vida. Además, las personas con una drogadicción también pueden contar con ciertos rasgos de personalidad que promueven el abandono de la propia recuperación.

Creo que de entrada habría que considerar sobre qué sustancia estamos hablando al pensar en drogadicción. Cada una impacta las facultades mentales de manera distinta. La marigüana por ejemplo afecta en atención y pensamiento en cuanto a su velocidad. No obstante, todas en común afectan a nivel dopaminérgico, aunque en cantidades distintas. Según la droga consumida, se puede dejar de lado casi todo, pues nada genera tanta dopamina como la sustancia producida.

¿Como intervienen las dos lineas de la psicología?
Yo creo que desde la psicología educativa se puede trabajar más la prevención, y la clínica más a la intervención.
Espero haberte contestado.

Un alumno drogadicto trae problemas de autoestima, así como dificultades en sus emociones para poder observar con objetividad, por lo que recomiendo terapia Psicológica Cognitivo Conductual.
Para prevenir la drogadicción se puede acceder a la terapia educativa.

La adicción a las drogas afecta el funcionamiento del individuo en todas las áreas de la vida. Las funciones ejecutivas que son las implicadas en el desempeño escolar, como son: la memoria, la atención, la concentración, la motivación, entre otras, se encuentran por así decirlo secuestradas por la adicción a las sustancias. Las drogas activan los circuitos de recompensa del cerebro, lo cual tiene como efecto la obtención de placer sin esfuerzo, lo cual se denomina obtención de recompensa inmediata. Esto deriva en un comportamiento obsesivo-compulsivo, donde la persona solo puede pensar en obtener dicha recompensa y se va desconectando de la vida. A su vez las sustancias tienen un efecto de sobreexcitación en el cerebro y esto tiene un costo en diferentes áreas, que se ven afectadas a causa del consumo prolongado, ocasionando deterioro en las capacidades cognitivas del individuo.

El consumo crónico desorganiza las funciones cognitivas de la mente (psicología educativa) además el interés libidinal este puesto alrededor de esa droga, sería muy importante conocer más acerca de cómo se relaciona ese sujeto con la sustancia de la que depende (psicología clínica) y que está consumiendo, no todas las drogas impactan igual.

La psicología clínica y la psicología educativa pueden abordar la pregunta sobre la relación entre la drogadicción y la deserción escolar desde diferentes perspectivas y ofrecer intervenciones complementarias:

Psicología clínica: Desde esta perspectiva, se analizarían los aspectos individuales y psicológicos del estudiante que pueden estar contribuyendo a su uso de drogas y a su deserción escolar. Se explorarían factores como la historia personal, las experiencias traumáticas, los problemas de salud mental subyacentes, las habilidades de afrontamiento y las relaciones familiares. Los psicólogos clínicos pueden realizar evaluaciones exhaustivas para identificar los factores de riesgo y diseñar intervenciones terapéuticas individualizadas, como terapia cognitivo-conductual, terapia de grupo o intervenciones familiares, para abordar tanto la drogadicción como los problemas asociados con la deserción escolar.

Psicología educativa: Desde esta perspectiva, se examinarían los factores contextuales y ambientales que influyen en el comportamiento del estudiante y su deserción escolar. Se consideraría el entorno escolar, las relaciones con los compañeros, la calidad de la enseñanza, el apoyo de los profesores y el clima escolar en general. Los psicólogos educativos pueden implementar intervenciones a nivel escolar, como programas de prevención del abuso de sustancias, capacitación para profesores en identificación y manejo de estudiantes en riesgo, y estrategias para promover un ambiente escolar positivo y de apoyo.

La psicología clínica y la psicología educativa pueden colaborar para abordar de manera integral el problema de la drogadicción y la deserción escolar. Mientras que la psicología clínica se enfoca en los aspectos individuales del estudiante y su tratamiento terapéutico, la psicología educativa considera los factores contextuales y sistémicos del entorno escolar y desarrolla intervenciones a nivel escolar para prevenir la deserción y promover el éxito académico y emocional de los estudiantes.