El ultrasonido estructural es una herramienta diagnóstica avanzada en medicina materno-fetal que se realiza generalmente entre las semanas 18 y 24 de embarazo. Su propósito principal es evaluar detalladamente la anatomía del feto para detectar cualquier anomalía o defecto estructural.
Este tipo de ultrasonido permite observar órganos vitales del feto, como el cerebro, el corazón, la columna vertebral, los riñones y las extremidades, entre otros. A través de este estudio, se pueden identificar condiciones como malformaciones cardíacas, problemas en el sistema nervioso, defectos en el tubo neural (como la espina bífida) y otras anomalías que pueden requerir intervención temprana o planificación específica para el nacimiento.
Además de ofrecer información crucial sobre la salud del feto, el ultrasonido estructural también ayuda a la pareja a tener una visión más completa del desarrollo de su bebé, contribuyendo a la tranquilidad y al proceso de preparación para la llegada del nuevo miembro de la familia.
08/11/2024