Dr. J. Guillermo Rodríguez Ayala

Delirium

El delirium o estado confusional agudo es una manifestación inespecífica de enfermedad en el anciano. A menudo la familia nota un cambio agudo en el paciente en el que está agitado, desorientado, con un pensamiento desorganizado, puede estar también somnoliento o con inversión del patrón de sueño-vigilia. Debe de ser considerado como una verdadera urgencia geriátrica puesto que es una manifestación de algún otro proceso (Ej: infección urinaria, neumonía, respuesta a fármacos, etc) que este ocurriendo en el cuerpo del paciente.

Depresión en los ancianos

La depresión en los ancianos es bastante común, es discapacitante y a menudo subtratada. Sus manifestaciones no son las mismas que en personas jóvenes. En pacientes ancianos con depresión existe un aumento en las quejas somáticas, es decir, se quejan mas de situaciones que previamente podían haber estado controladas (dolor abdominal, dolores articulares, etc). Existe una mayor queja de problemas de sueño, falta de apetito, agitación e iritabilidad. En mayor medida se ve afectada su capacidad cognitiva y la funcionalidad del paciente. Sin duda la depresión debe de ser tratada ya que afecta la calidad de vida del paciente e inclusive su expectativa de vida.

Trastornos de la marcha

Existen diferentes cambios fisiológicos asociados al envejecimiento que favorecen caídas. Como tal, un síndrome de caídas se define como tres o mas caídas en los últimos 6 meses, una caída en el último mes o una caída complicada, como podría ser fracturas de cadera o traumatismos craneoencefálicos. Además de los cambios normales asociados al envejecimiento que pueden provocar caídas se agregan estados patológicos como diabetes, hipertensión, etc, que predisponen a caídas en el anciano. Por otra parte la prescripción inapropiada de ciertos medicamentos también puede contribuir al respecto. La valoración geriátrica ayuda a determinar riesgos y medidas para prevenir caídas y desenlaces fatales