Dr. Gerardo Castro de la Maza Gerling

Hola, creo que la odontología moderna y actual (desde 1997 que se aprobaron por la FDA el uso de láser en la odontología para tejidos blandos y duros) ha hecho cambios notables en cómo hacemos ahora los procedimientos tradicionales, ha cambiado la velocidad de reparación de los tejidos, el confort, y la eficiencia.

Existen diferentes tipos de láser y aplicaciones, y específicamente para la extracción de un diente, se puede utilizar para realizar lo menos traumáticamente posible alguno de los pasos realizados durante la cirugía (corte de tejidos blandos y duros), y post-cirugía como coadyuvante en la cicatrización, control de inflamación y dolor (terapéutico).

El odontólogo que cuenta con estas tecnologías y está certificado en el uso de ellas pude asesorar de manera eficaz en cómo se puede sacar ventajas de estas modernas tecnologías y su beneficio real.

Y para eliminar esas molestias el uso de láser quirúrgico dental es sumamente eficaz y alivia el dolor de inmediato, además de que no vuelve a salir una afta en el mismo lugar en la gran mayoría de las veces. Sólo requiere aplicarse un poco de anestésico tópico (gel o líquido) y aplicar el láser y en unos segundos queda con una nueva capa que a los pocos días caerá y dejará el tejido sano de nuevo. La otra alternativa es aplicar láser terapéutico de acción más conservadora pero acelera mucho el tiempo de curado de las aftas.