La otitis hace referencia a la inflamación o infección del oído. Existen dos tipos principales: otitis externa y otitis media.
La otitis externa es la afección del conducto auditivo externo y membrana timpánica, conocida popularmente como "oído de nadador". Según la duración de la infección, hablamos de otitis externa aguda, crónica o maligna. Ésta última variante es la menos frecuente y daña huesos y cartílagos cercanos al oído en paciente que ya tengan un sistema inmunológico débil.
La otitis media afecta propiamente al oído medio (espacio por detrás de la membrana timpánica y la trompa de esutaquio) generalmente de causa infecciosa, debida a hongos y bacterias. La otitis media aguda o puntual suele aparecer a consecuencia de resfriados, alergias y sinutis; mientras que la otitis media crónica o recurrente ocurre a causa de la secreción desde el tímpano de un líquido espeso que habita en el oído provocando las infecciones.
La otitis externa es la afección del conducto auditivo externo y membrana timpánica, conocida popularmente como "oído de nadador". Según la duración de la infección, hablamos de otitis externa aguda, crónica o maligna. Ésta última variante es la menos frecuente y daña huesos y cartílagos cercanos al oído en paciente que ya tengan un sistema inmunológico débil.
La otitis media afecta propiamente al oído medio (espacio por detrás de la membrana timpánica y la trompa de esutaquio) generalmente de causa infecciosa, debida a hongos y bacterias. La otitis media aguda o puntual suele aparecer a consecuencia de resfriados, alergias y sinutis; mientras que la otitis media crónica o recurrente ocurre a causa de la secreción desde el tímpano de un líquido espeso que habita en el oído provocando las infecciones.